jueves, 16 de junio de 2011

La carta de mi nieto / Por José Utrera Molina

El asalto a la Bastilla Jean-Pierre Houël (1735-1813)

"...ZP quiere prorrogar su legislatura para culminar los objetivos sectarios de su agenda..."

La carta de mi nieto

José Utrera Molina
Ayer, concretamente en el periódico El País, se publicaba una carta de mi nieto Rodrigo en relación con los insultos y agresiones que había sufrido su padre recientemente. He de comenzar escribiendo que el protagonista de esta carta, Rodrigo Ruiz-Gallardón Utrera, goza por mi parte de una estimación fuera de lo común. Le conozco, sé que acumula en su joven personalidad una serie de virtudes poco frecuentes, pero sobre todo tengo que señalar su admirable claridad mental, su objetividad, su falta de prejuicios y su incontaminación de cualquier género de sectarismo político. Es todo un hombre, que es la mejor definición que se puede hacer de una persona. Me ha conmovido su carta porque en ella afirma rotundamente un concepto que fue muy habitual en la prosa política de Ortega y Gasset, quien decía: “Hay que pensar con arquitectura”, es decir, con perspectiva. Añade Rodrigo que vivimos en un gravísimo momento histórico y alude también al final a una descomposición de valores que todos sufrimos. Suscribo esta angustiosa preocupación y esta reflexión serena de mi nieto.

Hace unas noches, cuando eran aproximadamente las dos menos cuarto de la madrugada, un griterío infernal me despertó de mi sueño; según pude comprobar después, era el clamor de los indignados en las calles más céntricas de Madrid. La verdad era que mi despertar con sobresalto no lo había sufrido desde hacía muchísimos años cuando las calles de Málaga eran recorridas por gentes que gritaban: “Hijos sí, maridos no”. Yo pregunté por aquellas fechas, con tan sólo 10 años, qué significaba aquello y mis padres respondieron: “No saben lo que dicen”.

A ese pozo insondable de la memoria han venido en estos días múltiples recuerdos, algunos clavados como punzadas en los primeros latidos de mi joven corazón. Creía tal vez ingenuamente que esas etapas de crispación histórica habían terminado. Recordaba las frases de Aristóteles cuando escribía que el cobarde y el valiente no podían ser igualmente estimados. Ahora compruebo que no es así y que quizá, en el final de este túnel oscuro por el que transitamos, se pueden adivinar situaciones por cuya liquidación hemos trabajado y yo diría que rezado muchos españoles. Hoy al leer la prensa me informo del criterio sublime de Ramón Jáuregui de desenterrar el cuerpo de Franco del Valle de los Caídos. Me parece un soberano disparate y, sobre todo, la traducción a nivel muy concreto del insaciable odio que llena el corazón del presidente del Gobierno, que en definitiva quiere prorrogar su legislatura para culminar los objetivos sectarios y antinacionales que tiene en su sagrada agenda. Es muy posible que la queja y el grito de muchos españoles no pueda impedir tamaña injusticia histórica. Que nuestras palabras se ahoguen en el silencio, que nuestras quejas se ignoren por completo, que nuestro dolor no sea atendido, que nuestra indignación no sea estimada. Pero tenemos muchos españoles la obligación al menos de escribir con letra firme la verdad entera de lo que ha sido la historia de España, hoy manipulada y aniquilada, por los que representan el Gobierno de la Nación. Que sepa Zapatero que un pueblo no puede vivir esclavo de los caprichos de un demagogo, de un enfermo de ira y de rencor. Que queremos por todos los medios que desaparezca de la escena española y que nos libere de esa atroz pesadilla que estamos sufriendo día tras día con su presencia.

¿Es posible –me pregunto– que un torrente de odio semejante pueda acercarse a las venas calientes de España? ¿Es posible que una capacidad impresionante de rencor, pretenda ahogarnos sepultándonos en la mentira de lo que ha sido con sus errores y con sus defectos, con sus fallos y con sus éxitos la torturada historia de España? ¿Es posible centrar en la vida de un hombre, como fue la de Francisco Franco, el cúmulo de condenas que sin rigor y sin justicia se están representando sobre su nombre? Parece que sí, sin embargo, aunque mi voz sea ingenua y solitaria, incapaz de movilizar el sentimiento de nadie con el corazón en alto y el alma en vilo, proclamo y declaro que es insoportable la falta de ecuanimidad y de dignidad histórica del presidente del Gobierno y también la de sus acólitos que, por miedo o por otras causas similares, permanecen en silencio contemplando todo este desastre. Dios quiera mandarnos en algún momento un rayo de luz para que se rompan las tinieblas que soportamos con impotencia y amargura. Dios quiera que la ventura de una nueva esperanza nos sitúe con el alma tranquila y que la sombra nefasta del presidente del Gobierno aparezca disuelta en el desprecio y en la señalización de su poderosa ignorancia.
Es verdad que vivimos unas horas gravísimas pero es también muy cierto que la energía histórica de España no puede sucumbir ante tanto cieno y tanta vileza. Hay que creer en el milagro y yo, octogenario superviviente, creo en él y espero que algún día, aunque yo no pueda verlo, España quede liberada de la ruindad de tantos enanos y malandrines como los que nos gobiernan en la actualidad. Hoy estoy orgulloso de romper mi silencio. Quizá mis palabras aparezcan como salidas de un horno hirviente, pero no podría nunca soportar que alguien me señalara por la indignidad de mi silencio.

*José Utrera Molina es abogado.

5 comentarios:

  1. Sr Utrera Molina, vaya por delante mi máximo respeto a su persona, no por sus apellidos que para mí eso no tiene ninguna importancia, pero si como persona, que de eso ya se encargaron mis progenitores en educarme de forma para que respetara a todas las personas al margen de razas, colores o ideologías.

    Decía una parte de la letra de "Angelitos Negros" que tan popular hizo a Antonio Machín:

    Aunque la virgen sea blanca
    píntame angelitos negros
    que también se van al cielo
    todos los angelitos buenos

    Pintor que pintas con amor
    ¿Por qué desprecias su color
    si sabes que en el cielo
    también los quiere Dios?.

    Esa es la gran verdad, que Dios es tan GRANDE y GENEROSO que acoge a los de derechas y izquierdas, ¿Por qué hay un distintivo especial que califique a los de derechas como mejores personas?.

    Sr Utrera, mienta usted a Dios en dos ocasiones en su comentario "Dios quiera mandarnos en algún momento un rayo de luz para que se rompa las tinieblas que soportamos con impotencia y amargura. Dios quiera que la ventura de una nueva esperanza nos sitúe con el alma tranquila y que la sombra nefasta del presidente del Gobierno aparezca disuelta en el desprecio y en la señalización de su poderosa ignorancia".
    Pero ya que menciona usted a Dios, cree que las palabras que usted le dedica a un hermano suyo, de odio, ira y rencor las aceptaría Dios (porque Dios dice que todos somos hermanos) ¿verdad Sr Utrera?.

    Un saludo cordial

    Juan José García

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  2. Apreciar racismo, odio, y rencor en las expresiones de Don José Utrera es un exceso solo justificable si se da por aludido el lector. Don José siente lo que cualquier español decente, de derechas o izquierdas, sentirá por la abominable gestión de un hermano en Dios como Zapatero y compañía que nos está haciendo pasar una de las peores crisis en todos los órdenes de la historia. Pues claro que el creyente pide a Dios que por la señal de la santa cruz nos libre de nuestros enemigos, y a ser posible que la justicia terrenal los aleje de nuestra vista y los expulse de nuestras vidas al igual que Jesucristo expulsó del templo a latigazos a los mercaderes.
    Ojalá nuestros gobernantes gozaran de la capacidad, honradez y caballerosidad que siempre ha mostrado Don José Utrera Molina. Efectivamente un hombre de conducta encomiable y de un mérito extraordinario, solo por aguantar a su yerno ya sería digno de todo respeto.

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  3. Don Antonio, muchas gracias por haberme abierto los ojos sobre mi gran ignorancia, no sabía los meritos contraidos por Franco para entrar en las iglesias bajo palio, de todas formas ese Jesucristo que expulsó del templo a latigazos a los mercaderes, es el mismo Jesucristo que permite el gran patrimonio de la iglesia mientras miles de personas mueren de hambre en el mundo. Don Antonio seamos serios y consecuentes con una triste realidad, y el que este libre de pecado que tire lo que pueda.
    Yo Don Antonio como humano me siento pecador ¿y usted?.

    Sobre el final de su comentario, yo no tengo porque opinar, en todo caso que sea el yerno.

    Don Antonio yo si me despido con un saludo para usted, es mi educación para con mis hermanos, porque usted para mí es mi hermano en Cristo, así afortunadamente pienso yo.

    Saludos cordiales

    Juan José García

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  4. Don Juan José García, usted tiene todo el derecho del mundo a expresarse como le venga en gana, pero no venga usted a dar clasas de moralidad a los que somos de DERECHAS, esto no se compra ni se vende, esto se mama y esto solamente está reservado a la buena gente.
    Nosotros somos personas que solamente queremos hacer el bien a los demás, nos sacrificamos por nuestros hermanos como Cristo dio su vida por nosotros, que distinto sería el mundo si las izquierdas fuese nada más que la mitad de como somos y pensamos nosotros.
    No nos gusta los escándalos Sr García, todo lo contrario que a ustedes los de izquierdas, mire, le voy a contar un caso que paso en nuestra propia familia que demuestra palpablemente como se evito un escádalo en nuestro entorno familiar. Corría el año 1963, cuando mi hermana quedo embarazada de forma no deseada, lo que se llamaba entonces juegos de juventud. Mi padre como buen cristiano tuvo la feliz idea de mandar a mi hermana a Londres, con el pretexto de perfecionar su ingles y de esta forma abortar sin dar el menor escándalo, ese era mi padre, arropado lógicamente por mi madre, eso Sr García es una familia de DERECHAS, y si luego hay que estar en contra del aborto, pues se está, pues para eso estamos, para defender a esas víctimas inocentes de ese asesinato que es el aborto.

    Don Fernando Espinosa

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  5. He querido dejar pasar unos días del comentario de Don Fernando Espinosa, pero viendo que nadie dice ni pío, diré que el modesto Sr Espinosa adactandose el mismo el DON, retrata en su comentario a buena parte de la derecha española, digo a "buena parte" porque afortunadamente no son todos así, aunque si les guste La Gaceta/e Intereconomía, sobre todo esta TV donde la mayoría de las noches son todos de derechas, aunque ellos presuman de plurales e imparciales.

    Si señor, esto es como aquello de yo me lo guiso y yo me lo como. Podrán decir ustedes que las televisiones de izquierdas hacen lo mismo, y es verdad también hay mayoría de tertulianos de izquierdas, pero hasta el punto de ser TODOS del mismo color, yo por lo menos no lo he visto y lo más triste para ustedes es que tampoco lo han visto.

    Lo que cuenta DON Fernando Espinosa sobre el aborto, eso ha sido muy frecuente en la derecha española, pues su buena economía le era muy fácil mandas a sus nenas a Londres para dejar el "paquete" y luego buenos RODILLAZOS Y GOLPETAZOS DE PECHO en el paripe de la Sata Misa.

    Que bonitos y cristianos ejemplos.

    Juan José García

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