miércoles, 24 de marzo de 2010

MÉXICO-AGUASCALIENTES: EL REY TUERTO / Por Jaime Oaxaca

Arturo Macías
El gallo de Aguascalientes


EL REY TUERTO



Jaime Oaxaca

México [ 20/03/2010 ]

Dicen que en el país de los ciegos…

¿Eso será Arturo Macías? En realidad a cualesquiera de los toreros mexicanos que sea considerado el mero mero de la torería azteca, sería un rey… en un país de ciegos. Aprovechando su nombre de pila, existe quien se haya atrevido a llamarle ¡el rey Arturo!

Recordará usted que la catapulta de la carrera de Macías fue aquella famosa tarde en la plaza México, mayo de 2006, cuando cortó dos orejas a un serio toro de Barralva; era la temporada de primavera o torista, unos cuantos estaban presente en los tendidos del coso capitalino.

El hecho le valió la repetición en la temporada 06-07 fue el 21 de enero, repitió el 28 y se coló hasta el 5 de febrero. De ahí pa’lante. Esas tres semanas fueron definitivas en el despegue de su carrera.
Nada la pudo detener, ni siquiera aquel percance sufrido en su columna vertebral que lo tuvo al borde de la parálisis. Así que, en los dosmiles siete, ocho y nueve, ha sido uno de los que más ha toreado.

Su tarde cumbre fue el pasado 29 de noviembre al lado de José Tomás en la plaza México. Realizó una faena sensacional, considerada la faena de la temporada; ¡ojo!, inclusive por gente que chanela.
Aquel domingo la gente se entregó con Arturo, la afición se ponía de pie a ovacionar en cada pausa de la faena, toda realizada en los medios; ¡Ah!, pero ahora no por su carisma, ni por su arrojo al ponerse de rodillas. ¡No señor! Las ovaciones y los gritos de torero, torero, fueron por su bien torear.
Nadie, entiéndase, nadie, le puso un pero a esa faena. Lástima que por exigencias del alternante español la corrida no fuera televisada; no obstante, se supo en todo el mundo taurino.

De Arturo Macías López, un torero de 27 años de edad y cinco de alternativa, se vierten infinidad de opiniones: que si es corriente, que si no sabe torear, que si sólo pega trapazos, que sólo sabe dar rodillazos, que únicamente torea a la gente, que su sonrisa es lo que aplaude el público, que sólo torea novillos, que es un valentón, que es un diestro sobrado valor, que es un gran torero, que se queda más quieto que nadie, que es el sucesor de Eloy Cavazos, que es el rey Arturo, etc., etc.

Evidentemente cada quien tendrá su opinión; sin embargo, es el torero más importante de nuestro país: ha desbancado a todos los demás y lleva una racha impresionante de salidas en hombros en la plaza México.

La faena de Macías a “Cuatro Caminos”, fue considerada la mejor de la temporada
Estar a la cabeza del escalafón no debe ser sencillo, aunque la tauromaquia mexicana suele ser una pachanga en muchísimas plazas del país. Quite usted Guadalajara y México (algunas veces) y casi todo lo demás son simulacros o parodias taurinas, con reses lidiadas como toros que no rebasan los tres años de edad.

Para tener el membrete de figura del toreo, reconocido por todo el mundillo taurino, no es suficiente destacar en plazas mexicanas; es imprescindible ir, torear y triunfar del otro lado del charco.

Ya el año pasado había planes de Macías, pero le daban un corridita sin importancia para confirmar su alternativa mexicana en Madrid. Se sintió ofendido por la propuesta hispana, pero la verdad es que la fiesta mexicana está muy devaluada en España. Así que los logros de Macías, no representaban ninguna categoría para los empresarios españoles.

Este año se encontró, buscó -o lo que haya sido- a Antonio Corbacho, un apoderado sumamente respetado en tierras hispanas. Algo le habrá visto al torero de Aguascalientes porque el importante representante no hubiera apostado sin posibilidades de triunfo. Corbacho no se hubiera juntado con un chalao.

José Tomás y Alejandro Talavante son dos credenciales importantes en el currículum de Corbacho. Aquellos son dos toreros diferentes pero de la misma cuerda, comunes en quedarse muy quietos y pasarse cerca a los toros. Quizá eso fue lo que gustó a Antonio de Arturo.

Con Corbacho en el escritorio, cambio abismalmente la situación para hacer campaña en España, contratos en plazas de primera como Valencia, Sevilla y Madrid, hablan por sí solos.
Ese mejor trato, francamente, no creo que sean por lo logros de Macías en México sino por Antonio Corbacho.



Algo tendrá el agua donde la bendicen. Si el apoderado trae un mexicano, éste debe valer, dirán algunos empresarios españoles.
Por lo pronto, ya cortó una oreja en Valencia, parece decidido a triunfar en todo el mundo taurino para no estancarse y quedarse siendo el rey tuerto.
Via: Opinion y Toros.com

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