Por la calle real
porque el liderazgo de Nelson Mandela puso los ojos del mundo sobre ese país: Ejemplo de tesón y constancia, respetuoso de los derechos, amante de la paz y creyente en las infinitas posibilidades humanas. Sudáfrica ha logrado avances sociales, económicos y políticos mediante el ejercicio de la cordura, del diálogo y de la firme fe en Dios, en el hombre y en la sociedad democrática. Se abrió al mundo como una vitrina y tendrá que aprovechar las oportunidades que se desprenden de esa gigantesca promoción. 2. Se impusieron los equipos mejor entrenados, los que dominan la técnica y la creatividad, los que hicieron un juego de conjunto incluidas las figuras descollantes, los que trabajaron con coherencia y sin alardes ni conflictos, los bien dirigidos. Europa marca la pauta con España, Holanda y Alemania a la cabeza. Por América dieron la cara Uruguay, Paraguay, Chile y México. Brasil apenas asomó algo de su buen juego y Argentina, cargada de figuras, terminó haciendo el ridículo, como era de esperarse. No puede dar quien no tiene o lo ha perdido en el sórdido mundo de los excesos.
4. La ramplonería de algunos medios quiso desviar la atención de lo esencial hacia el pulpo adivino, la cávala, el protagonismo comercializado de algunas “estrellas” y otros asuntos propios de estos tiempos mediáticos y vulgares, pero al final queda en primer lugar el esfuerzo de un país que apenas sale de la pesadilla de la discriminación, los sueños de un continente con grandes desafíos, las imágenes que dan la clave del éxito: pasión, conocimiento y creatividad, en una combinación que define una actitud ante el triunfo y ante el fracaso.
5. El juego sucio puede dar algunos resultados, pero la gran lección de España es que jugó limpio, confiada en que la lealtad da mejores dividendos. Es el mayor impacto de este Mundial de Futbol: Su lección de buen juego va más allá del futbol dijo Vicente del Bosque…y el sabe porqué lo dice. Ojalá los españoles y el mundo capten la lección.
6. Murió el victimismo como excusa, los complejos de inferioridad y el triunfalismo. España jugó sin complejos porque su entrenador y sus jugadores se sienten tan europeos como los alemanes y los holandeses sin menosprecio por nadie. Pusieron el talento, el conocimiento, la técnica y una experiencia que viene desde las escuelas menores. “De alguna forma van muy por delante de lo que se creen los políticos”, dice el jefe de deportes de un diario español. Pasearon la bandera roja y gualda con todo lo que significa frente al arco del mundo y ante cientos de millones de tele espectadores. Por fin España se presenta tal como es, no como cree que es o quiere que sea su mediocre élite política: Alegre, elegante, apasionada, moderna y tradicional en esa mezcla que la hace el mejor país de Europa; un viejo provinciano que se hace respetar y enseña, y unos muchachos que se dejan conducir sin renunciar a sus particularidades, a la espontaneidad propia de su edad y de su época, que respetan, saben su papel y lo asumen en ejercicio pleno de su responsabilidad. ¡Por fin sale al ruedo la España Grande!
7. No se si caerán en cuenta que hasta en el más recóndito rincón de América se sufrió por España hasta el último instante del gol que hizo justicia. Aquí apostamos por los nuestros y se fue decantando el corazón a medida que salían unos y quedaban los que debían quedar. Al final, en cada pase de la selección española pusimos todas las emociones porque hay sangre hispana en las venas.
8. Justo cuando celebramos el Bicentenario de nuestra Independencia, quisiéramos que en ambos lados del Atlántico no se repitan los desencuentros de hace doscientos años y la acción de nuestras sociedades y de nuestros políticos transcurra por el cauce que ha marcado Vicente del Bosque y los 23 ángeles de su cielo rojo y gualda.
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El poeta taurino Ángel Omaña canta el triunfo de España
FINAL DEL MUNDIAL 2010
Después de años de impaciente espera,
llegó la hora de España en Johannesburgo.
Al dejar a Holanda hundida en el lamento
y arrancando el ole de lo más profundo.
Momentos de angustias en la cancha
marcaron el final de la jornada
y como fiera enfurecida rugió Holanda
sintiendo el dolor de la estocada.
Desconcertada sigue y pierde los estribos.
ante la bravura hispana desatada.
Vicente Del Bosque sin sonreír, sonríe
sabiendo que la fiera está domada.
Desempate, en prorroga de historia,
con Iniesta en rol de matador.
El máximo trofeo lo conquista España
y la gloria inmaculada de campeón.
El mundo se incendió con la victoria
atrapando corazones en llamas de alegría.
Una a cero fue el final de la contienda,
a favor de España, la España mía.
Ángel Luís Omaña
Que hermoso poema....que gran partido , nos tuvo en suspenso en cada minuto y al final nos hizo llorar de alegría, una victoria bien merecida, mucha lucha, excelente técnica y humildad en el juego....fueron maravillosos....
ResponderEliminarLos españololes que estamos lejos creo que sentimos mucho más las victorias de España, la extrañamos tanto que cualquier cosa que se refiera a ella ya estamos con el corazón en la mano.. y siempre vivimos con la ilusión de poder regresar algún día a nuestra patria a nuestra madre...
Gema González
Panamá