Expone 24 óleos y 4 técnicas mixtas sobre cerámica. El tema central es el origen y la mística del mundo del toro a través de los símbolos de la liturgia, el ritual y la metafisica.
Al igual que otros pintores taurinos, Vidriales fue novillero profesional desde 1966 hasta 1986. Y ese también fue su nombre artístico en los ruedos.
“Me pusieron ese nombre y lo he seguido llevando como pintor”-comenta Ercilio.
“Pinto desde niño, es la vocación más tierna y pura que conservo de mi niñez. La abandoné relativamente cuando empecé a torear aunque siempre me acompañó la afición de la pintura durante esos años”.
Con más de 300 exposiciones sobre motivos taurinos, su pintura rebelde y singular llega a las entrañas del toreo con su valor, miedo, gloria y tragedia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario